En el cierre de la pasada cumbre CELAC, celebrada en
Santiago a fines de enero, se vivió un tenso momento entre los mandatarios de
Chile y Bolivia. El presidente Morales ataco duramente a su par chileno, con
frases como “cuando hay tratados y convenios que violan los derechos del
pueblo, esos tratados o convenios no son intangibles”, o “no se puede quitar a
la fuerza de manera injusta la salida al mar del pueblo bolivariano”.
El presidente Piñera, a su vez, le contesto “los tratados
son para cumplirse, y como le dije ahora y tantas veces: no basta una decisión unilateral
para modificar un tratado”, así como le pregunto “imagínese usted que pasaría en
el mundo si cada país que firmó un tratado se sintiera con el derecho de
declarar que el tratado no está vigente, eso no funciona así”.