18 ago 2019

El socialista renovado que impulsa la restricción horaria de menores de edad

El socialista renovado que impulsa la restricción horaria de menores de edad
Hace un año, Mauricio Viñambres adquirió notoriedad al anunciar una ordenanza municipal que pretendía prohibir que menores de 14 años circulen durante la noche sin compañía de un adulto. La medida causó polémica al ser impulsada por un militante socialista y contar con el respaldo del líder del movimiento Acción Republicana, José Antonio Kast, con el que se fotografió junto a la concejal UDI Viviana Núñez.

Hoy, Viñambres, al revisar su situación en el partido, dice que no pagó costos políticos por intentar aplicar la medida. La situación, sin embargo, contrasta con las críticas que realizaron sus pares Gonzalo Durán y Andrés Santander, secretario general del PS, quien dijo que la iniciativa no representaba al partido.

“Hoy día tengo mayor visibilidad, pero mi postura y mis convicciones han sido siempre las mismas”, dice el alcalde, en conversación telefónica.

Socialista renovado


Viñambres se apronta a cumplir 16 años como alcalde de Quilpué. No es oriundo de la zona. Nació en el sector sur de Santiago, hasta su adolescencia en La Florida cuando formó parte de la pastoral juvenil. En la década de los ochenta ingresó al MAPU usando la chapa de “Micho”, como lo conocen sus viejos amigos. En esa época conoció a Enrique Correa, Rafael Gumucio, José Antonio Viera-Gallo y al exdiputado Julio Silva Solar, en quienes reconoce haber escuchado por primera vez hablar de la renovación socialista.

En el MAPU, su misión era capacitar a otros militantes de Algarrobo, Valparaíso y Viña del Mar. Con el retorno de la democracia y la disolución del MAPU, Viñambres se hizo militante del PS.

A mediados de los noventa fue asesor de Viera-Gallo en la Cámara de Diputados y se capacitó en gestión municipal en Alemania, hasta que en 1999 el diputado Juan Bustos lo convenció de competir para concejal en Quilpué. El salto lo dio en 2004 cuando se transformó en el primer socialista en llegar al sillón edilicio en una comuna tras 97 años de dominio de RN, la DC y el PR. En esos días le ganó por 72 votos a la candidata RN Angelina Rubiños, siendo destacado por la entonces candidata Michelle Bachelet, cuando en una entrevista fue consultada por el desempeño PS en las municipales.

En 2015, al igual que el año pasado, Viñambres volvió a incomodar a parte de las filas socialistas por organizar una movilización de alcaldes contra la reforma educacional de Bachelet, acusando al Gobierno de equivocar el camino por dar un bono de incentivo al retiro docente sin conocer el proceso de desmunicipalización.

El edil dice que el tiempo le dio la razón y que todas sus acciones se desarrollan “con la convicción de 15 años como alcalde, en donde he visto cómo cambia el mundo y a veces veo que al PS le ha costado adaptarse a esas realidades”.

Dialogante


Desde el entorno del jefe comunal dicen que buena parte de su actuar político lo adquirió cuando era aprendiz en el MAPU. Y añaden que no le importa sentarse a dialogar con los que piensan distinto para buscar salidas a los conflictos.

Por ello no tuvo problemas en reunirse con Kast e invitar a Joaquín Lavín (UDI) y a Felipe Guevara (RN) a sumarse a la iniciativa sobre limitar el horario para menores de edad.

También se reconoce como cercano a la alcaldesa Virginia Reginato (UDI) y es de los pocos ediles que financia un centro de la Fundación Daya en la comuna. También se ha reunido con empresarios para generar inversión en la comuna.

“Luché por la democracia para que nos pudiéramos juntar a conversar y opinar. Por eso no tengo problemas en sentarme con un UDI, eso ayuda a la transformación social y a la gente”, manifiesta el alcalde.

Futuro en el PS


“Creo que el PS es socialdemócrata y somos un partido de centroizquierda, no de izquierda”, dice Viñambres sobre el perfil que debería tener el partido.

Entre las potenciales cartas presidenciales del PS, destaca a Máximo Pacheco y a José Miguel Insulza, en quienes ve liderazgos importantes para la conducción del país.

En 2016, junto a su par Gervoy Paredes de Puerto Montt, mencionó a la senadora Isabel Allende como una buena carta presidencial del PS. La idea no prosperó, por lo que declinó apoyar a Insulza o al expresidente Ricardo Lagos y se transformó en uno de los primeros alcaldes en respaldar a Alejandro Guillier (independiente).

Hoy dice que varios dirigentes de la ex-Concertación le han dicho que compita por la gobernación regional. Él lo descarta, porque tendría que renunciar en octubre y todavía le falta gestionar la apertura de una comisaría, un centro médico y unas piscinas. “Me encantaría ser gobernador, varias personas me lo han pedido y me he sentido muy presionado, pero mi rol está con los vecinos”, afirma.