Así lo aseguró Mario Desbordes (RN). Desde la UDI confirmaron
que Allamand no quiso aparecer con Longueira el domingo.
El polémico episodio que generó el quiebre entre el ex pre
candidato a la presidencia, el RN Andrés Allamand, y el generalísimo de campaña
de Pablo Longueira, Joaquín Lavín (UDI), sigue dando qué hablar. Luego de que
se filtrara el hecho de que Allamand habría proferido gruesas palabras al ex
ministro de Desarrollo Social tras un duro impasse entre ambos, éste último
decidió pedirle disculpas públicas al perdedor de las elecciones del domingo.
¿Allamand indispensable?
Junto con manifestar que sin el apoyo de Allamand y RN, el
triunfo de Longueira sería imposible, Lavín expresó: "Quiero pedir
disculpas por no haber tratado a Andrés Allamand en la forma en que se merecía
protocolarmente esa noche en la UDI" a la vez que desmintió haber recibido
insultos por parte del ex opositor de Longueira.
En medio de la polémica y la poca certeza respecto de lo que
sucedió el domingo post elecciones, el senador UDI, Hernán Larraín manifestó que
el gesto de Lavín era "una señal de humildad para evitar las tensiones
innecesarias". Del mismo modo, confirmó lo que se habría conocido luego de
la noche del domingo: "Es cierto que Allamand no quiso salir a saludar al
balcón junto a Pablo, pero lo entiendo porque debe haber sido una derrota
difícil", opinó Larraín.
Frente a la incertidumbre que se generó sobre la continuidad
del ex secretario de Desarrollo Social al mando de la campaña de Longueira,
-tras la petición de reemplazo por parte de parlamentarios RN-, Lavín aprovechó
la instancia de pedir disculpas para confirmar que seguiría siendo generalísimo
en el comando del candidato UDI.
"Dedicaré los próximos cinco meses de mi vida a tiempo
completo para que Pablo Longueira sea el próximo presidente de Chile" y
afirmó que en los próximos días se reunirán con RN para definir la forma en que
este conglomerado se integrará a la campaña.
Tras enterarse de la iniciativa de Lavín, el secretario
general de RN, Mario Desbordes, expresó que ahora que el generalísimo de Longueira
había decidido "reconocer su error", no creía que fuera necesario
considerar el reemplazo del ex secretario de Estado en el comando del
abanderado gremialista. "Se vivió un momento bochornoso e incómodo, pero
sabemos que no fue culpa de Pablo y en todo caso, la decisión de cambiar a
alguien de su comando siempre va a estar en sus manos", opinó.
Además, Desbordes reconoció y valoró el gesto y señaló que
"era muy necesario que Lavín pidiera disculpas" con el fin de limar
las asperezas.